Nuestra imaginación. Si dejásemos volar nuestra imaginación llegaríamos a lugares y sentimientos insospechados. Es una caprichosa y maravillosa forma de evadirnos o quizá sea la única y la más valiosa que posee el ser humano, ¿quién sabe? Mi querido lector, súbete al carrusel de la fantasía. Demos rienda suelta a ese caballo que nos lleva por el camino de los sueños a lo largo de nuestra vida. Permitamos que nuestros pensamientos e ideales se desboquen. Realidad o fantasía, ¿qué más da? Imagina, idealiza, conspira contra la sociedad que nos maneja. Tus sueños, mis sueños, nuestros sueños. Lo más íntimo, personal e individual. Es... todo lo maravillosamente real que tú quieras. Es... propiedad privada.