Argumento de L"universalisme Europeu
La intervención occidental en todo el mundo se ha legitimado siempre con la proclamación y la defensa de valores considerados universales. Si en una primera época se inspiraba en la religión, a partir de la Ilustración el universalismo europeo toma un aire más bien secular y pone el acento en conceptos como la civilización, el desarrollo y el progreso. El supuesto subyacente es que estos valores de origen europeo son universalmente válidos, porque derivan de la ley natural, revelada o conocida a través de la pura razón. Sin embargo, como argumenta Immanuel Wallerstein en este ensayo breve y elegante, se trata de una universalidad al menos discutible.1