Tras dejar Pueblo en 1973, trabajó para Blanco y Negro, del diario ABC y, posteriormente, para algunas agencias. En 1985, en vista del creciente mercadeo amarillo de las noticias del corazón, decidió abandonar la profesión y dedicarse a su otra gran pasión: la cocina. En 1986, con su marido, el periodista francés Jean Michel Bamberger, montó con gran éxito el restaurante Cana Joana en Ibiza, que regentó hasta su jubilación, en 2007.